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El alcalde de Salamanca, junto a la subdelegada del Gobierno, Encarnación Pérez, y el delegado territorial, Eloy Ruiz, destaca que el objetivo es impulsar una de las “piezas clave de la economía local e importante fuente de empleo”, que cuenta con una inversión de 4,9 millones de euros, cofinanciado al 33 por ciento por cada administración. Esta nueva hoja de ruta tendrá un plazo de ejecución de tres años y se vertebra en cinco ejes principales, que buscan “la precisión”, y que ampliará los escenarios de experiencias extendiéndolos a los barrios del Oeste, Bretón y San Vicente e incorporando la constelación arqueológica.

Unas 300 personas han sido ya evaluadas por este proyecto, que se lleva a cabo desde el CMI de Puente Ladrillo. El alcalde señala que este programa, único en España, es una aportación desde Salamanca para que la atención precoz de estas enfermedades deje de ser una asignatura pendiente.

El alcalde de Salamanca reconoce la disciplina, el compromiso y la vocación de servicio en favor de la seguridad y la protección de los ciudadanos de los 31 alféreces y 25 sargentos que han realizado formación en transporte aéreo militar, vehículos aéreos no tripulados y controlador aéreo en el Grupo de Escuelas de Matacán. Destaca que la presencia de los alumnos de Matacán “hace más rica a esta ciudad” por su convivencia con los salmantinos.

El alcalde, Carlos García Carbayo, visita la última fase de los trabajos de un “proyecto histórico” que cuentan con una inversión de 1,8 millones de euros, dentro de la Estrategia de Desarrollo Urbano Sostenible e Integrado (Edusi) TORMES+, que en total cuenta con un presupuesto en torno a 22 millones de euros, con financiación de fondos FEDER gracias a las políticas de cohesión de la Unión Europea. García Carbayo destaca la integración del río Tormes para ser un espacio disfrutable por salmantinos y turistas a través de 13 kilómetros de riberas desde La Salud hasta Santa Marta, que cohesiona barrios y proporciona desarrollo para sus habitantes, con múltiples beneficios medioambientales, económicos y socioculturales que contribuyen a una Salamanca aún más saludable y con una mayor calidad de vida. A lo largo de 28 hectáreas en ambas riberas del río Tormes se han creado zonas de corredor ambiental y 8 kilómetros de paseos peatonales de ribera compatibles con usos deportivos blandos, se incrementa el arbolado con la plantación de 10.000 unidades de diversas especies que potenciarán la biodiversidad autóctona y se aumenta la vegetación de ribera en más de 52.000 metros cuadrados.